Y seguimos con los chales!

En este caso, el Aleatha Shawl de Tracey McCorkle (con patrón gratuito en Ravelry):

Tenía una madeja de Noro Sekku que tenía muy buena pinta y que (se suponía) daba para hacerlo entero; al final no era así y tuve que hacer algunas modificaciones: unas lineas de menos y un acabado distinto.
La lana tampoco me gustó mucho, los colores son preciosos y el tacto es realmente bueno pero el hilado es muy irregular, con zonas tan gordas como pelusas que afean el resultado al tejer.

El resultado: un pañulo de cuello más que un chal, con un tacto muy agradable pero que no me acaba de convencer del todo.

¡Feliz día internacional del Crochet!

La verdad es que hay días para todo... pero el de hoy me viene de perlas para enseñaros lo último que he acabado (y digo acabado porque ando con varias cosas a la vez y, claro, así no hay forma de acabar nada).
Hace unos días me apunté en Ravelry al grupo Calling All Crocheters donde, si te inscribes para una fecha (tienen una por semana), te han un mes de plazo para acabar con un proyecto que ellos eligen especialmente para ti. Mi plazo era del 31 de agosto al 28 de septiembre y mi proyecto el Garden Pals de Tamie Oldridge.

 

 

Ha quedado un poco cabezona pero el patrón era así. Los ojos se los he hecho con lana y la flor no lleva el boton de adorno del patrón original porque es para un bebé y prefiero que no lleve nada cosido por seguridad.

Para hacer los amigurumis yo siempre uso las lanas Bambini, de Lanas Stop, que me resultan muy cómodas ya que son fininas (me gusta hacerlos pequeños) y tienen un montón de colores distintos (entre ellos, un color piel bastante realista para las muñecas).